La nueva obra del escritor e investigador medievalista Rafael Alarcón adentra al lector en un apasionante enigma: las esculturas y canecillos sexuales
que pueblan el arte románico español y europeo.

¿Imágenes sexuales en los templos cristianos? ¿Por qué están ahí, esas parejas que copulan con descaro. Esos personajes que enseñan sexos exagerados? ¿Por qué la iglesia los permitió en sus lugares de culto? ¿Qué pensarían sobre ello los fieles medievales? ¿Quién propiciaba que estas obras se esculpieran y se mostraran sin pudor? Sin embargo, aunque parezca asombroso, no se trata de un libro sobre erotismo, sino sobre una desconocida faceta de la espiritualidad medieval, presentada en un magnífico libro sobre el arte románico desde una nueva y apasionante perspectiva.
En “La Erótica Sagrada del Románico”, el lector se adentra de nuevo en un opaco enigma histórico veteado de preguntas y códigos ocultos. Tras un minucioso trabajo de investigación Rafael Alarcón plantea una sólida y apasionante hipótesis: un sector de la Iglesia, junto a los Maestros Constructores tejieron un mensaje oculto, altamente espiritual, y en apariencia indescifrable que aún hoy sigue despertando un vivo interés, siendo uno de los debates más controvertidos de la historiografía medieval.
Ilustrado bellamente con más de 800 dibujos a lápiz de Patricia Rodríguez Muñoz, cada ilustración retrata con minuciosidad tanto las formas como las proporciones de cada pieza escultórica, a partir de fotografías tomadas in situ en los más de tres mil templos visitados. El excelente trabajo de la ilustradora hace posible el reconocimiento visual de obras que, en algunos casos, el paso del tiempo, o el vandalismo, ha deteriorado sustancialmente desde que Rafael Alarcón las vio por vez primera al inicio de sus investigaciones.
La obra editada de Rafael Alarcón Herrera, abunda en ensayos plenos de análisis audaces sobre temas como, los Compañeros Constructores, el Camino de Santiago, la Orden del Temple, las Vírgenes negras, las tradiciones religiosas populares, y el simbolismo del arte románico.
Confiesa el autor, que hace ya cerca de cincuenta años comenzó a trabajar en este proyecto tras descubrir en la Colegiata románica de Santillana del Mar (Cantabria) algunas de tales imágenes eróticas en los canecillos de los aleros. Son incontables las catedrales, iglesias, y ermitas visitadas, en grandes ciudades, pequeñas aldeas, y ruinosos despoblados, como lo son también los kilómetros recorridos a lo largo de España, Portugal y Francia, sin olvidar las horas muertas empleadas en escarbar por archivos y bibliotecas. “La Erótica Sagrada del Románico” es la obra de toda una vida, la culminación de un proyecto que ha abarcado la dilatada carrera de uno de los historiadores y ensayista más interesante de nuestro tiempo.
EL LIBRO EN SU DIMENSIÓN TANGIBLE
En su dimensión física es “La erótica sagrada del románico” un volumen en DINA4 de 624 páginas impresas en blanco y negro sobre un buen papel con un sutil tono hueso. Encuadernado en tapa dura y cosido con cabezadas, añade una cinta de punto a modo de marcapáginas.